miércoles, 9 de septiembre de 2015

Redescubriendo la Historia Por: Prof. Sara T. Aponte Meléndez, PPL







Colaborando con la preparación de un suplemento periodístico para la Conmemoración de aniversario de fundación, surgió la posibilidad de compartir con los lectores las razones que me motivaron a comenzar estudios profesionales en Historia y las experiencias durante este aprendizaje. Al hacerlo pude sopesar cómo se ha ido transformando mi manera de ver la historia, cuáles han sido las satisfacciones y qué espero lograr como historiadora profesional. Mi interés es llevar un mensaje a todo aquel que pueda haber subestimado lo que puede representar el estudiar historia. Quizás a través de mis vivencias se sientan animados a explorar esta aventura.

Al completar la Maestría en Planificación en la Universidad de Puerto Rico, decidí evaluar alternativas para lograr mejorar mis ingresos y conseguir mejores oportunidades de empleo en ese campo. A su vez quizás combinar mi experiencia laboral con los conocimientos académicos recién adquiridos. Dos factores contribuyeron a decidirme. El primero fue el deseo de repasar los conceptos estudiados una y otra vez y que puse en práctica a la hora de preparar el proyecto final de grado. Muchos de los procesos de planificación urbana, por ejemplo, me habían sugerido manejar fuentes históricas para entender la transformación de las sociedades y pueblos. La Historia, habia capturado mi atención durante los años de estudio.

El segundo factor fue el no contar con un programa doctoral en planificación a nivel local que permitiera profundizar sobre teorías, discursos y debates en función a nuestro desarrollo como pueblo. Como la idea de trasladarme al extranjero con tal propósito no era factible, por las razones expresadas, decidí considerar la historia como una alternativa que pudiera responder a mis intereses. Gracias a estas inquietudes, pude darme cuenta de mi falta de conocimiento sobre Puerto Rico, asunto que generó una mayor urgencia. Estoy segura de que a muchos les ha sucedido lo mismo.

Recordé entonces los cursos de bachillerato donde se requería leer temas de historia, cuando a menudo me sentía condenada al aburrimiento. Aquél era un mundo extraño y desconocido lleno de datos, fechas, nombres, batallas, etcétera, que era incapaz de retener. La lucha entre la botella y la comprensión se convertía en una tortura constante. Hoy día entiendo, sin embargo, que estudiar historia no es memorizar, no es empeñarse en recordar una serie de nombres y fechas; eso lo podemos encontrar en cualquier texto. La Historia es un recuento de lo que seres iguales a nosotros hicieron en su época. Ninguno de estos datos es relevante por sí mismo, sino que tienen

importancia en cuanto forman parte de un proceso. Lo importante es que dentro de esta gran base de datos existe una investigación continua que permite conocer la evolución y transformación de la humanidad, desde sus orígenes hasta el presente. Es decir, a través de la historiografía se estudian los acontecimientos relativos al ser humano a lo largo del tiempo, tomando como base el análisis crítico de fuentes concretas y a veces contradictorias.

Los cursos de historia me han permitido aprender de acontecimientos y personajes que apenas conocía. El conocer la trayectoria como pueblo desde otros ángulos, me ha provocado cierto deslumbramiento ante tanta riqueza histórica. Igualmente llamativas las fascinantes metodologías que se utilizan para facilitar la articulación de ideas y el flujo de información. Es como abrir una caja de pandora y  descubrir que tenemos luz verde para cuestionar y analizar desde otras perspectivas quizás nunca antes contempladas, o abonar a juicios críticos que se hayan realizado

Más aún, debemos adentrarnos en la mentalidad de la época para comprender las motivaciones de los personajes, de modo que el poseer otra preparación académica facilita la utilización de herramientas adicionales a las tradicionales y mirar la historia desde otros ángulos. Estas emociones también me han provocado cierta tristeza y coraje por las limitaciones en cuanto a la accesibilidad.

Me pregunto, ¿hay que realizar estudios graduados para poder conocer nuestra realidad como pueblo? Ante la falta de una visión que muestre los factores que han contribuido en el desarrollo económico y social de nuestro país, me tentaría a contestar que sí. Nuestro sistema educativo carece de estrategias que permitan una divulgación amplia sobre la historia del país. Esto lo vemos a diario en los hechos que ocurren en la Isla y la manera en que se maneja la opinión pública. ¿Cómo facilitar el flujo de información sobre nuestra historia?

Este es el reto que debemos atender los futuros historiadores. Somos una nueva generación, muchos provenientes de otras disciplinas, ávidas del conocimiento historiográfico y de la diversidad de discursos y escuelas de pensamiento. Contamos con recursos innovadores que pueden apoyar los métodos de investigación que distinguen a la disciplina. En fin, ver la Historia como proceso y asumir posturas balanceadas e inteligentes capaces de hablar a cualquier niño, joven y adulto, y despertar su interés por conocer de nuestra historia.
Entonces, ¿por qué estudiar historia? La respuesta es sencilla. Porque gracias ella, el ser humano descubre los lazos que lo unen al pasado y amplía su conocimiento de las perspectivas humanas. Es por eso que hago un llamado a los estudiantes sobre nuestra responsabilidad más allá de memorizar. Es debatir y descubrir significados que permitan explicar a cualquier persona, no importa su nivel intelectual, social y educativo, lo que fue, lo que pasó y lo que está pasando. Afortunadamente contamos con recursos tecnológicos e innovadores que facilitan la reconstrucción del pasado para entender el presente. De esta forma estaríamos en mejor posición de realizar aportaciones serias y contundentes para el beneficio de todos.


saraaponte@gmail.com

miércoles, 26 de agosto de 2015

Planificación : ¿ Y eso con qué se come? Por Karla Cristina Torres Cruz


                                                      


    Parecería tratarse de algún chiste mal gusto cada vez que algún pariente o vecino común me pregunta: -“¿A qué te dedicas?”- La tierna y cándida pregunta coloquial que nunca parezco  poder responder  en una sola oración sin armar un debate de armas tomadas.

-Planificación- respondo.

De la baqueta, comienzo a organizar el torrente de contestaciones consecutivas que tendré que lanzar a lo “batallón” en defensa propia.

Claro, como si ser estudiante de maestría en tiempos de crisis no fuera motivo suficiente de cuestionamientos y ataques.  Súmale a eso tener que prepararte para la ola de gente que piensan que estas “mirando pal’ techo” porque no te dedicaste al Derecho o la Medicina.

Un alto por ciento de las veces llega el comentario: -“¿eso es como de eventos y bodas y esas cosas verdad?-. Las temperaturas del cuerpo se elevan, el pulso se acelera, y un suspiro hondo y largo tiende a aparecer reflejado en el rostro.

-No- Respondo.                                                                                                                 

Ya en mi caso, tercer año de maestría, varios internados y más  reuniones familiares de las deseadas, me habita en defensa propia un cinismo terrible como reacción al agotamiento de contestar. Y para terminar la conversación rápido, evadir conflictos o evitar que se me caliente la cerveza, respondo frecuentemente:-“Seguro, eso”- o -“Algo así…”.-

Más alarmante aún es el segundo torrente de comentarios con el que  tropiezo: -“¡Bah! Suerte ahí. Si en este país lo menos que hay es planificación”. De momento, el ánimo que nos traía la mochila nueva, los bolígrafos con diseñitos y, claro, las clases, colapsan.

Claro, y ahora que andamos en tiempos de sequía, como si el baño a cubitos no fuera suficiente, prendes el televisor, sale el noticiero, y en menos de media hora escuchas tres veces el comentario: “esto es culpa de la mala planificación”

Ah! Claro, ahora existimos.  

¿Cómo puede ser aceptable  que nuestra profesión venga vestida de tanta burla?  Peor aún, la desesperanza que se respira en nuestro país llega a tal nivel, que el hecho de ejercer una profesión que contemple una posibilidad de cambio real es motivo justificado para ser  humillados.

Confieso que cuando llegue a la Escuela Graduada de Planificación (EGP) no tenía idea de lo que estaba haciendo ni sabía qué realmente era la planificación. Primer año y me toca tomar clases con “Navas y Gutiérrez”.  Escuchar estas clases me hacía sentir como si el país  estuviese reclutando “Avengers” y “esta que está aquí”, apenas puede hacer una avena. 

En el momento era desesperante. Mis compañeros de Bachillerato haciendo “lo suyo” y yo aquí  volviendo a empezar. En retrospectiva, me alegro de haber aceptado el reto.  La planificación como profesión  interdisciplinaria es una herramienta polifacética, creativa y dinámica. La misma trabaja para optimizar el bienestar de una ciudad y sus partes.  Un planificador puede crear desde un sistema de transporte colectivo hasta un programa de disminución de animales “realengos”.   Ser planificador trasciende un empleo, ser planificador es un estado, un estilo de vida, un modo de ver y ser.    

 
No es noticia nueva el  que pocas personas  consigan de primera instancia las experiencias a las que aspiran. ¡No nos desanimemos! La academia, los profesores las experiencias laborales son herramientas para transformar nuestra sed de cambio en un plan real, viable y posible.  Nos toca llevar a la mesa una transformación real y hacer del espacio uno nuestro. Haremos de nuestra profesión lo que nos propongamos hacer de ella.  


En arroz y habichuelas, no es la flecha, es el indio. ;) 

 Sumo a esto que no está mal cambiar de sueño,  represar el espacio e incluso a nosotros mismos. Lo único constante es el cambio, y  jamás deberíamos doblar el lomo sólo porque seamos parte de un nicho de entes analíticos, casi “misfits”,  que se empeñan transformar, desde el modo en el que hacemos la fila del tren hasta el modo en que coexiste una comunidad.

                                           

¡Mangas al codo pichones!

El país nos necesita.

La planificación, como todo arte, se redefine en la vanguardia.

 

“La crisis, es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países, porque la crisis trae progresos. La creatividad nace de la angustia como el día nace de la noche oscura. Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis se supera a sí mismo sin quedar superado.”-Albert Einstein -

 

 

miércoles, 12 de agosto de 2015

Alodra Ocasio: Reflexión sobre el impacto de las Ayudantías estudiantiles




Saludos y felicitaciones nuevamente a las personas que por medio de su incitativa, apoyo técnico escritos o lecturas, facilitan este espacio específicamente dirigido a la reflexión constructiva. También quisiera aplaudir a los(as) compañeros(as) que desfilaron en nombre de la EGP este 17 de junio de 2015 en su tan merecido día de graduación. El asunto que discuto en este escrito se relaciona a la importancia de las contribuciones como estas, que hacen de nuestros gestos, ejercicio que aporta contenido. Los conceptos no tienen significado sin un sentido o propósito que les defina. Este asunto se puede contextualizar a diversidad de escenarios. Como estudio de caso elaboro mi punto utilizando como ejemplo el significado del concepto o idea de la verdad  y su relación a la realidad que se enfrentará ante la cada vez más reducida oferta para muchos(as) estudiantes gozar de los beneficios que tuvimos aquellos(as) que participamos del programa PEAF.

¿Qué es la verdad?

Este concepto es frecuentemente usado, especialmente como estandarte o escudo en debates políticos, entre otras situaciones. Es así que como planificadores(as) o ciudadanos(as)  podemos incurrir en el error de entender o utilizar este concepto equivocadamente. La verdad o lo cierto, como sinónimo de lo correcto. La verdad del mundo en que vivimos es muy triste. Recordemos que para muchos(as) de nosotros(as) fue el interés o la necesidad de transformar la verdad de nuestro entorno, la principal motivación para aprender sobre esta disciplina dirigida a la acción. Por esto pienso que la verdad puede ser otra herramienta retórica para justificar lo injustificable y desprestigiar los sueños de un mejor mundo por quizás ser todavía una mentira. Como por ejemplo, vivimos en un mundo intolerante, que sea verdad no quiere decir sea correcto. Es verdad que las formas de discrimen como la xenofobia son parte de nuestra cultura, y por esto ser verdad, no progresamos.

La verdad sobre el programa PEAF, ¿Una oportunidad para empezar procesos de transformación desde nuestro recinto?, ¿La verdad y nada más? ....

Es cierto que participar del programa PEAF significa que los(as) estudiantes reciben un estipendio a cambio de una experiencia formativa para brindar recursos y apoyo al recinto de Río Piedras del sistema UPR, que de otro  modo les representaría un mayor gasto y una cada vez menos atractiva oferta para potenciales candidatos. No obstante, recientemente este programa al igual que otros (PET y Jornal) son desmantelados, producto de los recortes para la estabilización de la crisis fiscal que se enfrenta. La verdad es que esta realidad es perjudicial para la revitalización de muchos programas pequeños como nuestra escuela y la oportunidad de continuar los estudios graduados libre o casi libre de deudas.

La verdad es que los(as) estudiantes que eligen entre la “variedad” de trabajos disponibles en el mercado y el PEAF tendrán más tiempo para trabajar en su tesis de maestría o doctorado. Esta verdad es positiva para aquellos(as) que aun teniendo un bachillerato o maestría no han encontrado trabajo, si tienen trabajo no es una real fuente de ingresos que subsidie sus gastos como estudiante  o quieren hacer de la experiencia graduada su única dedicación. Además de ser una elección más conveniente para algunos(as), la participación es condicionada al desempeño académico como estudiante a tiempo completo entre otros criterios.

Los detalles sobre por qué tomé la decisión de someter una solicitud a este programa y participar por 2 años luego de ser aceptada no viene al caso, lo que es relevante para esta discusión ha sido el impacto que tuvo en mi vida. Pues ha sido una oportunidad que amplio mis experiencias profesionales y académicas para facilitar este más preparada ante la triste verdad del mundo laboral. También brindó una mínima estabilidad económica, mientras me esforcé para contribuir por medio del aprendizaje positivamente en nuestra sociedad. De esto ante todo estoy muy orgullosa, pues si algo debería ser verdad, es que el aprendizaje es una importante tarea para que las ideas y acciones tengan propósito y por tanto contenido.

El trabajo de los(as) estudiantes debería ser tomado más en serio. Pues al igual que otras labores como el mantenimiento del hogar y el cuido de la familia se trivializa por su desconexión a la producción de bienes materiales específicamente económicos e inmediatos. La visión sobre el trabajo de los(as) estudiantes es cada vez menos representativa del producto que tiene para la sociedad. ¿Qué dice esto de los valores de nuestra sociedad?, ¿Qué el trabajo que se hace sin compensación económica deberá ser menos valorado y que el desarrollo de incentivos para que se continúe no es necesario? Esta es una triste verdad. Pues aunque como todo en la vida, algunos(as) tomaran su trabajo más en serio que otros(as) el hacer generalizaciones o no considerar la diversidad de dimensiones que tiene un asunto será representativo de un pobre análisis. Pues si algo pudiera beneficiar a la universidad ante las dificultades económicas que enfrenta sería la planificación estratégica para el empleamiento de los recursos que mejor evidencia su calidad, sus estudiantes.

Los títulos no son nada sin contenido

El trabajo para obtener nuestro título de maestría no será vacío y tendrá contenido cuando lo definamos por medio del cumplimiento del fin que tiene. Demostrar por medio de nuestras acciones  aplicamos este aprendizaje por el cual recibimos este mérito. Aunque algunos(as) ya no tengamos esta preocupación, pues no tuvieron la necesidad de aprovechar esta oportunidad o ya hayamos asegurado los años que podemos sacarle provecho a los programas para estudio y trabajo, no dejemos pasar las oportunidades para discutir y atender estos asuntos en la medida que podamos.

Si algo aprenden los pichones de planificación es que la clave para la resolución de problemas requiere de análisis integral. Sobre todos los factores que inciden en la multiplicidad de un asunto para identificar las oportunidades que hacen de la triste verdad, una nueva mentira de la realidad. Les invito a que no limitemos el ejercicio teórico al aula y que apliquemos el conocimiento para el mejor manejo de situaciones que nos tocan de cerca, como los recortes de fondos a los programas de apoyo para los(as) futuros(as) estudiantes. Pues al igual que en escenarios en donde se manifiesta la injusticia hacia personas por sus diferencias, toda instancia que atente contra la dignidad o derecho de equidad de un ser humano, nos afecta a todos(as) por igual.

Hasta la próxima y como empieza una hermosa canción de Mercedes Sosa:

“Que vivan los estudiantes
Jardín de nuestra alegría
Son aves que no se asustan
De animal ni policía”

#foros_ reflexión_construciva

lunes, 2 de marzo de 2015

¡De viaje de campo…! Por: Alejandro Reyes Luciano y Laura Martí Muñiz



   Como estudiantes, siempre tenemos esa clase o investigación que nos encanta ya que incluye algún viaje de campo y tiempo fuera del salón de clases.  El pasado martes 24 de febrero de 2015 un grupo de estudiantes y la Profesora Maritza Barreto visitaron los terrenos del Fideicomiso de Conservación de Puerto Rico en Manatí.  Como de costumbre el grupo iba con su agenda de tomar muestras de sedimentos y estudiar el perfil de playa de tres playas en la región.

        Todo iba normal y estábamos a punto de irnos a la próxima playa, fuera de la reserva, cuando de momento… ¡MIREN!… todos miramos al suelo arenoso y vemos una tortuguita, en ese momento se la lleva una ola dejándola débil, moribunda y más lejos de su meta, el océano.  De inmediato identificamos que era un carey, animal en peligro de extinción.  La profesora llama al Fideicomiso para reportar el hallazgo ya que no podemos tocar estos animales.  El grupo de expertos nos brindó  instrucciones de cómo manejar al carey, así que esperamos  que llegara el equipo de trabajo para salvar al animal.

        Dentro de la emoción de encontrar un carey y hablando se escucha un… ¡CUIDAO’!..  Cuando vemos una segunda tortuguita un poco más activa que la otra.  Seguimos las instrucciones que nos dio el grupo del Fideicomiso con la otra tortuga y esperamos a que llegaran a rescatar a Magnetita y Alejandra (nombres que cariñosamente le dimos mientras esperábamos).

        Pasaron unos minutos cuando llega un grupo de aproximadamente cinco personas del Fideicomiso con la planificadora experta en manejar estas tortugas.  Cuando se ponen a buscar a lo largo de la playa… ¡BINGO!… encontraron dos nidos llenos de tortugas vivas esperando a ser rescatadas. Estuvimos observando a la experta unos minutos y seguía sacando tortugas del nido.  Resulta que estos nidos tenían más de 100 días y ya tenían poca esperanza de que salieran las tortugas.

        El nacimiento de estas tortuguitas llenó de alegría a los del Fideicomiso y nos reportaron que se salvaron un estimado de 60 Careyes, animal que se encuentra en peligro de extinción.  Cuando salimos de la universidad, jamás pensábamos que íbamos a presenciar este evento tan poco común.  De ser un día rutinario, este viaje vino a ser una experiencia inolvidable y especial.






domingo, 30 de noviembre de 2014

¡ A Planificar! -Hector Rivera


Cuando retomé mis estudios en Planificación me preguntaron ¿para qué quería estudiar eso? Si en este país no se planifica nada.  Mi contestación rápida a esa percepción, de la mayoría de las personas, fue que en éste país si se planifica y mucho, lo que nos falta es implantación.

Constantemente y a diario nosotros planificamos de una manera u otra.  Por ejemplo cuando planificamos las salidas diarias y establecemos prioridades en el viaje, lo que haremos en el fin de semana o en nuestras vacaciones.  Muchas veces esto planes cambian o se modifican dependiendo de factores que influyen en el desarrollo de los mismos.  Ejemplo de estos factores son: un cambio imprevisto o nos quedamos sin presupuesto para el viaje.

Estos mismos factores son los que afectan la implantación los planes a nivel de país.  Se establecen unas políticas públicas y se desarrolla el plan pero luego no se implanta.  Esto puede deberse a un amplio espectro de razones: no hay voluntad política, no se atendió adecuadamente, el problema (¡sí, hay malos planes!) o no hay presupuesto entre otras cosas.  A nuestro entender, el caso que más nos afecta en Puerto Rico es el de la voluntad política.  Esa fuerza decisiva de querer hacer las cosas y proveer los mecanismos de ejecución para que se lleven a cabo las acciones conducentes para la implantación del plan.  Básicamente, se piensa que “si no lo hicimos nosotros, no sirve; tenemos que hacerlo diferente”.  Es esta visión egocentrista la que nos ha costado mucho y hace que arrastremos los pies en vez de montarnos en la autopista del desarrollo.

Sabemos que los planes no son ni pueden ser estructuras rígidas e inamovibles, tiene que tener la suficiente flexibilidad para poder adaptarse a nuevas situaciones de cambio y poder integrar una solución al problema planteado.  Esto se debe a que los planes se desarrollan bajo un contexto histórico el cual va a cambiar con el tiempo.  Por eso no podemos implantar un plan sin antes actualizar sus objetivos y sus metas.

Hace unos días dialogaba con una compañera de estudios, sobre el Tren Urbano, comentábamos sobre la situación que obligaba a la administración a reducir el horario de operaciones y al aumento del costo.  ¿Cómo era posible que se hubiese planificado algo así?  Le comenté sobre cómo el diseño y la alineación del mismo influye en su poco volumen de usuarios.  Popularmente se dice que el Tren Urbano es utilizado, mayormente, por estudiantes y abogados, porque conecta los principales centros educativos del Área Metropolitana, el Tribunal Superior de San Juan y el de Bayamón así como la Universidad de Puerto Rico y la Universidad Metropolitana.  Por otro lado, también conecta otras agencias de gobierno y centros de salud.  Esta alineación sirve unos propósitos de viaje limitados porque su concepción original es de finales de los años 60 y principios de los 70.  Bajo el proyecto “Transportation & Urban Settlements Combined Action Project (TUSCA)” se diseñó un sistema de transportación masiva para toda las isla.  Este plan integraba la transportación con los usos del suelo.  Nunca se concretizó porque el gobierno no estuvo dispuesto a invertir los recursos necesarios para el mismo.

Para principios de los 90 se comenzó a evaluar alternativas de sistemas de transportación masiva y en 1996 se realizó la selección de lo que conocemos hoy en día como el Tren Urbano.  ¿Cuál fue el problema? Que se utilizó la misma alineación (servidumbre de paso) establecida en los años 70 y no se utilizó ni revisó el componente del uso del suelo.  Mucho había cambiado en 20 años, la geografía urbana, los costos y la tecnología.  Ahora teníamos la voluntad política, la programación y el “presupuesto” (el costo terminó triplicándose).

En resumen nos sobró voluntad pero fallamos en preparar un plan realista o a lo mejor se hizo y simplemente se ignoró.  Este es uno de los ejemplos donde nos quedamos cortos en algún componente de la planificación.  Un ejemplo sumamente gráfico debido a los costos y cargas que hemos pasado a futuras generaciones.

Solo hay que estudiar un poco la historia de la Planificación y veremos que existen miles de planes los cuales se han completado, otros se han quedado a medias y otros simplemente no se implantaron.  La inversión en tiempo y dinero, eso es tema a parte.


Como estudiantes estamos ávidos de salir al mundo profesional para poner en práctica lo aprendido en la academia; pero es sumamente importante tener en cuenta los actores principales en las tomas de decisiones.  Hay que recordar que son estos últimos los que tendrán el poder de implantar el plan y la estrategia sugerida o por el contrario engavetarlo.  No perdamos el ánimo ni el norte y vamos a planificar. Al Final, todos queremos un mejor Puerto Rico donde vivir y debemos ser parte de las soluciones, aportando a un proyecto de país en el que todos contribuyamos desde nuestros roles y visiones.

martes, 25 de noviembre de 2014

El GPS, Gaby, Willie, Giova & yo - Debbiann Centeno Quintana




Entre la desesperación por el paso del tiempo, la calidad atmosférica y los días invertidos que parecieron ser perdidos (porque de seguro no habría el mejor PDOP), se supuso comenzar nuestra aventura de recolección de datos que nos dirigía hacia el área # 3 de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras. Un Campus que nunca había experimentado y  mucho menos caminado. Pensar que nuestros pasos parecían no tener fin, hacían de esta expedición una para nunca olvidar. Comienzo relatando que nunca pensé estar un sábado en la UPRRP junto a mis compañeros que (riéndonos por no llorar) ,  al madrugar nos encontramos con un GPS descargado que tendríamos que esperar hasta el mediodía para utilizar. Esto es sólo el inicio, pues la travesía carga con grandes recuerdos de los que hoy nos reímos. 

Deseosos por comenzar, luego de salir a almorzar porque mi inquietud ya desesperaba a todos, tomamos el GPS rumbo a nuestra área. El  lugar  sólo lo conocía nuestra guía turística, Gabriela, mientras Willie y yo aprendíamos a reconocer lugares para poder saber dónde estábamos ubicados en caso de que nos perdiéramos, pues ante un grupo medio inquieto, pero responsable, todo es posible. Al llegar al punto de inicio, frente a la Facultad de Ciencias Naturales, unos minutos pensamos que el dispositivo no se iba a conectar. Y es que  entre roja y verde, la pantalla del instrumento provocaba nerviosismo,  sabíamos si podríamos ser  capaces de recolectar los datos. Ya conectado, verificamos el PDOP (4.4), la cantidad de satélites presentes y comenzamos a recolectar aceras enfocándonos en su condición.

Motivados, nos dimos cuenta de la incertidumbre presente al momento de delimitar el área a estudiar, pues el reconocer hasta donde termina la recolección en el perímetro era distorsionado por la continua presencia de árboles en el lugar. Ante estas circunstancias, más el clima un poco inestable, nos dimos cuenta que las líneas que supuestamente trazaban aceras aparecían como si estuvieran por encima de los edificios y al recolectar con puntos nuestro primer letrero institucional sólo aparecía en los atributos la opción estatal. He aquí cuando entró el pánico, pensábamos que nos saldría bien de primera instancia, pero no fue así. Como prepas en su primer día de clases, nos encontrábamos nosotros, aprendices de una nueva tecnología que si no fuera por la práctica en el salón de clases y en el campo con Alondra, ni siquiera hubiésemos sabido como recolectar. 

Con dichas circunstancias presentes y la preocupación de que no cuadraban los atributos en la base de datos creada con los que aparecían en el GPS detuvimos el trabajo para caminar un largo trecho hacia el laboratorio lo que cambio el horario de inicio de 12:30pm a 3:47pm, tiempo inesperado donde se experimentó, se recorrió y se enmendaron los errores que al parecer en primera instancia nadie sabía a qué se debía. Queríamos hacer hasta una base de datos nueva, no obstante, luego de revisar la base de datos, Gaby en conjunto con Willie, Giova y yo encima de la computadora, se percató del tamaño de los “lenghts” al momento de escribir los atributos. Con unos 10 “lenghts” marcados para una palabra como institucional, jamás podría ser ejecutada, pues se excedía del tamaño indicado. Ahí estaba el truco que nunca habíamos experimentado, pero nos habíamos percatado. Ya habíamos solucionado lo que pensaba que fuese un problema mayor. En cuanto a las líneas, todos preocupados buscábamos una respuesta en estudiantes presentes con la respuesta menos esperada; eso siempre pasa… también nos pasó… Interesante por demás, todos como que respiramos, nos tranquilizamos y decidimos tomar fuerzas para continuar. Definitivamente, no es lo mismo conocer la teoría, que la practica en su totalidad.



Ya con más seguridad, regresamos al campo, reconociendo que nos encontrábamos entre las facultades de Ciencias Naturales, Arquitectura y Bellas Artes; un espacio amplio, y diverso. Allí entre lecciones de vida, conteo manual y experiencias vividas hasta ahora en la escuela, comenzamos a recolectar desde el inicio las aceras que bordeaban el perímetro, sumadas a todas las aceras que entre los edificios se situaban, pasando el GPS de mano en mano para tener la experiencia de un trabajo compartido. Entre líneas que marcaban y otras que no, buscamos repetir lo que nos faltaba corroborando los pasos necesarios para la adquisición de datos. Nos acordábamos mutuamente lo que se debía hacer en el GPS, repasando lo aprendido en clase para poder lograr nuestro objetivo. Como primerizos, lo que alguien pudiese hacer en corto tiempo, ese primer día nos tomó más de lo que pensábamos, pero se pudo recolectar parte del trabajo. Era sábado, terminamos a las 4:50pm. Si llegábamos tarde con el GPS al laboratorio, imagínese como nos mirarían, para reírse, no; el tiempo esta monitoreado. Sin embargo, terminamos el día con grandes expectativas reconociendo que a pesar de las limitaciones pudimos unificar esfuerzos y conocimientos para salir adelante.

Con ímpetu y energía, ansiosos por culminar la recolección, nos encontramos los tres mosqueteros el lunes 10 de noviembre desde las 9:00am para prepararnos y caminar juntos hasta iniciar a las 10:00am la recolección de rótulos, vallas y aceras que faltaban. Willie como todo un experto inicio la recolección, mientras Gaby y yo identificábamos lo que nos faltaba, marcábamos los tramos y realizamos un conteo manual de los datos recopilados. Entre intercambios de labores, lluvias, sol y viento nos decidimos que sin importar las circunstancias tendríamos que terminar la recolecta de datos. Así que, acampando de rato en rato conociendo cada rincón de la universidad, corriendo y huyéndole al agua que no se decidía si caer completa o por segmentos, puedo decir que Willie y yo no sólo recolectamos, sino que fuimos instruidos por Gaby en la famosa cultura de la IUPI, momentos para siempre recordar.



Entre circunstancias fuera de nuestro control, pudimos concluir con nuestra recolección a las 1:30pm, ahora pidiendo al cielo que el check in se pudiera dar de forma correcta, porque si no, comenzaría otra nueva historia, esta vez creo que sería menos divertida. Ya de camino al laboratorio, ya no era Gaby, la guía, sino que entre nuestras risas por sus ocurrencias, era Willie quien ahora nos daba el tour de la IUPI poniendo en función lo aprendido. Al llegar al laboratorio nos percatamos que estaba cerrado, por lo que decidimos reunirnos a las 5:00pm para ver si todo el esfuerzo podría ser concretado al momento del check in. 

Ya con la colaboración de Giovanni, pudimos realizar el proceso con éxito. El check in funcionó. De esta forma, pudimos identificar la recolección con poli línea de 37 aceras bajo diversas condiciones  (25 buenas, 8  regulares, 4  malas). Utilizando punto demarcamos 16 vallas de control de acceso condiciones similares (11 buenas, 2 regulares, 3 malas) que se encontraban en áreas que controlaban (3 tránsito, 13 estacionamientos) y que se destacaban por dar acceso a   (11 entradas, 5 salidas). En adición, recolectamos 91 rótulos con punto que estaban en múltiples condiciones y usos (68 buenos, 9 regulares, 14 malos) (42 estatales, 49 institucionales, 0 promocionales) para una recolección total de 144 componentes en el área # 3. Dichos atributos fueron consultados por los integrantes del grupo en consenso al momento de realizar el feature class en la base de datos para igualar la descripción de los datos que serían recolectados.[1]
 
Con datos en mano, para culminar nuestra labor, en conjunto realizamos el mapa de nuestra área detallando los datos que obtuvimos, realizamos el informe con la información requerida y de forma individual expresamos nuestra experiencia en esta nueva aventura. Una que personalmente, contribuyó al desarrollo de nuevas capacidades, entender con más precisión la utilización del GPS, reconocer la utilidad variada de la tecnología en la recolección de información, poner en práctica todo lo aprendido en clase y descubrir nuevas funciones tanto en el instrumento como en el programa ARCGIS al momento de realizar el trabajo en su totalidad.

No obstante, no sólo gané un conocimiento académico, sino que pude conocer más a fondo grandes compañeros. Gente humilde y sencilla que dentro de cada situación sacan lo mejor de sí. Mis compañeros de aventura, mi grupo de recolección de datos, mis amigos. Al iniciar el proyecto no teníamos idea que como organizarnos, pero luego de largos contratiempos pudimos lograrlo. De seguro, luego de mi relato, hubiese querido reírse y recolectar con nosotros. En fin, todavía no puedo creer la multiplicidad detrás del GPS tanto para recolectar información como para unificar cuatro compañeros de planificación.







martes, 18 de noviembre de 2014

La Re-organización de la ciudad - Gustavo Acevedo

Existen muchas incógnitas sobre lo que podemos hacer referente al desparrame urbano del cual sufrimos hoy en nuestro país.  Cabe constatar que la solución a esto no se darásúbitamente, ni por un solo gobierno, sino que será un cambio paulatino en el cual más allá de revisiones estatutarias deberá haber un cambio en el paradigma del pensamiento sobre lo que es la planificación y como se ejecuta ésta.  Este escrito resulta como una reflexión sobre el ensayo producido por el Dr. Navas en el cual elabora una descripción de los males que aquejan a la ciudad hoy díaenumera cómo llegamos a donde estamos y propone las alternativas y las razones de éstas para optar por una reconstrucción de la ciudad.   Opté por hacer un recorrido similar, con tal de darle una coherencia a esta reseña: primero haré mención del desparrame urbano y el porqué de éste, luego plantearé posibles características de lo que he llamado la Re- Organización de la ciudad y posibles herramientas e ideas que pueden resultar en una solución concreta.

Desparrame Urbano
Nuestro actual ordenamiento territorial es resultado de la planificación “madura que llega a Puerto Rico con Tugwellla imitación del modelo estadounidense, y la falta de acción por décadas hacia un modelo que ha causado serias deficiencias en la organización de las ciudades de la isla.  Este está basado en la zonificación que impone regulaciones al uso terrenos y criterioscon fines de controlar la densidad poblacional.  Históricamente la separación de usos ha sido la causa del desparrame ya que restringe qué se construye y dónde, además hemos obviado la construcción vertical mientras se promueve la horizontal.  Otro factor que influye en el desparrame de la ciudad lo ha sido nuestro trasfondo histórico.  Con el proceso deindustrialización masiva que ocurre en Puerto Rico, sobrevino un movimiento poblacional del cual se deriva la ocupación de los espacios urbanos sin seguir necesariamente un patrón claro.

Existen otros dos factores, que a su vez se entrelazan, y promueven la dispersión que nos aqueja hoy día: el mercado de la tierra y el propio proceso de reconstrucción de la ciudad.  En el caso del primero se da más que nada por la estandarización de paquetes económicos referentes a la construcción tradicional y me atrevería a decir al desconocimiento de las ventajas de inversión en los modelos de usos mixtos que influyen en los costos de la tierra.  Concerniente al segundome refiero al proceso de competencia, invasión, fuga y desplace, y los efectos que resultan al reconstruir la ciudad.  La ciudad envejece a la vez que va disminuyendo su valor estructural, lo cual causa la intrusión de sectores que de otra manera no habrían llegado a estos espacios(invasión), lo que a su vez causa una fuga de quienes cuentan con mayores recursos para el mantenimiento de los lugares.  De los mayores efecto de este proceso, resalta el manejo de la plusvalía el cual queda claro que se pierde en los va y vienes del mercado sin llegar a los que fueron desplazados de sus hogares para la reconstrucción del área.

Re-organización de la Ciudad
El ensayo del doctor finaliza con las características que debería tener una ciudad: segura, accesible, habitable y sostenible.  Coincido con que la re-organización de la ciudad es capaz de promover todas estas características, pero cómo, ya que por alguna razón no hemos alcanzado esa meta.  Primero que nada la ciudad debería ser reagrupada para cumplir con las característicasantes mencionadas.  Para ello es necesario romper con los paradigmas de la planificación actual basada en los usos y fomentar una ciudad donde sea primordial la forma y la accesibilidad.  Para ello debemos no solo cambiar una mentalidad institucional, sino ciudadana.  Es ineludible laeducación acerca de los beneficios de una ciudad mas "recogida", tanto para los ciudadanos, elambiente y la economía, por ende, para el propio país.  Se debe impulsar la recuperación ytransformación de los espacios abandonados en vez de fomentar la implosión y el comenzar de cero.  

Por otro lado, el descuido de la ciudad y su arreglo se convierte en un ciclo vicioso de competencia, invasión, fuga y desplace si no creamos un método de preservar sus estructuras y fomentar la inversión y reinversión en ellas.  Es mi pensar que este proceso es intrínseco con la re-organización de la ciudad.  Esta (la ciudad) es un ente cambiante (físico y social), pero ese cambio puede y debe ser beneficioso para todos.  Es inevitable la búsqueda de una mejor distribución de la plusvalía que se genera al invertir en la reconstrucción de la ciudad.  Se podríaarticular un sistema donde se reduzcan los desplazamientos (permanentes), se estimule lainversión por parte de los propietarios originales, maximizando los recursos que estos puedan aportar y además se premie la re-organización de la ciudad.  Dicho sistema podría reducir la brecha de la pobreza que actualmente se da con el proceso de reconstrucción de la ciudad, de igual forma al articularse una manera de implantación del mismo se podrían solucionar los problemas mencionados en los párrafos que preceden.